Trabajo del Banco Ciudad sobre la pobreza

El plan de asignación universal por hijo reducirá un 5 puntos porcentuales la pobreza, de 32,5 a 27,5%, según lo anticipó un informe realizado por un equipo de economistas del Banco Ciudad de Buenos Aires. El beneficio, definido por el Gobierno nacional e instrumentado a través de la Administración Nacional de la Seguridad Social (ANSES), otorga $180 por hijo y hasta un máximo de cinco, a las familias sin trabajo o que se desempeñan en la economía informal. También incluye a los menores discapacitados. La medida fue reconocida por distintos especialistas, que ponderaron el impacto que podría tener en los sectores más desfavorecidos en términos económicos. En el trabajo que presentó el Banco Ciudad, desarrollado por el equipo de analistas que conduce el economista Luciano Laspina, se definió que la medida costaría un 1 punto porcentual del producto interno bruto en el 2010. “Llega 6 años más tarde y a pesar de que el gasto público escaló casi 8 puntos del producto entre el 2003 y el 2009”, agregaron los economistas. Entre sus fundamentos y consideraciones expresaron que, en la actual coyuntura laboral y social de Latinoamérica, la disminución referida sería una “paradoja” y puntualizaron: “Según nuestros cómputos, si el programa estuviese bien focalizado (es decir, si se distribuyen los 6 millones de beneficios que hoy se prometen entre los niños de hogares pertenecientes a los 3 deciles de menores ingresos), la pobreza podría caer aproximadamente 5 puntos (a 27,5 por ciento)”. El análisis incluye además una lectura comparativa entre las legislaciones de la Argentina con respecto a otros países vecinos, subrayando que hasta la medida anunciada por la presidenta Cristina Fernández la Argentina “carecía de un programa social de amplio espectro para subsidiar a los sectores más vulnerables de nuestra sociedad”.

Dentro de esa tónica, los economistas citados coincidieron en que el impacto de la crisis económica internacional se aprecia con creces en la desigualdad: “En el segundo trimestre del 2009 el 10% más rico de la población tiene 26,2 más ingresos que el 10% más pobre. En igual período del año 2008, esa brecha era de 23,4”. “En cuanto al ingreso por hogares, mientras la brecha descendía entre el segundo trimestre del 2007 y del 2008 (pasando de 17,8 a 16,9) en el segundo trimestre del 2009 se ubica en 18,5 veces”, agregaron. Otro dato relevante que se destacó el informe del Banco Ciudad es el aumento de participación de los ingresos en el 10% de los hogares más ricos, que pasaron de 29,9% en el segundo trimestre del 2008, a 31% en igual período del 2009. No obstante, reflejaron que si bien el 10% más pobre perdió participación, los sectores medios mantuvieron su participación en el 7,5% del total de los ingresos. Los economistas del Banco Ciudad puntualizaron que la economía argentina "es una fuente de paradojas en el frente socio-económico", que se expresa en "que la pobreza comenzó a subir en tiempos de fuerte crecimiento”. Así surge de los datos de la Encuesta Permanente de Hogares (EPH) que realizó el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INDEC). Al comparar los datos oficiales con su propia medición, los investigadores observaron que sus datos marcaron que la pobreza afecta al 31%del total de la población argentina mientras que el informe de la EPH ronda el 32,5 por ciento. Esa diferencia, cruzada por los cuestionamientos que recibieron en los últimos tiempos las cifras del INDEC, también estableció una nueva paradoja: la estimación privada de la pobreza es menor que la medición oficial. Para el relevamiento que realizaron los economistas del Banco Ciudad, la indigencia alcanza al 10,2 por ciento. Es decir, unos 4 millones de personas. Se trata de unos 2,5 millones más que en los cómputos oficiales.